Tanak vence en Turquía y aprieta el campeonato

Como se preveía, la última etapa del Rally de Turquía fue un relajante paseo por los alrededores de Marmaris. El peaje que se había cobrado la prueba en las etapas anteriores no invitaba a mucho más.

Unido a ello, las diferencias entre cada uno de los puestos que, con menos de 40 kilómetros por delante, no invitaba a atacar ni mucho menos.

Tanak ganó los tramos entre los cinco pilotos que habían logrado evitar el abandono. Los que se reengancharon gracias al súper-rally ajustaron sus autos con el tramo más limpio. Al final del día esperaba la Power Stage que, tal y como se ponía el Mundial, tenía una importancia capital, porque cualquier punto puede decantar la balanza a final de temporada.

Esos puntos extra llevaron a M-Sport a retrasar a Elfyn Evans para darle a Sebastien Ogier 1 punto más. La penalización que asumió el galés (picó en el control 5 minutos antes, 10 reales), permitió al francés llegar a la 10ª posición y sacar un punto más de los que pudiera conseguir en la Power Stage.

Neuville salió de los primeros y, a pesar de no encontrarse el tramo muy limpio, se tiró con todo. Sin responsabilidad en sumar puntos para el equipo, y fuera del top 10, el belga fue a por todas marcando el tiempo de referencia.

Dos autos por detrás salió Ogier. El francés necesitaba recortar y sumar puntos como fuera, y también salió a por todas. Pero un pinchazo en su trasera izquierda le terminó de retrasar tras ir por detrás desde el principio del tramo. La duda para ambos era qué haría Tanak. Pero para eso tendrían que esperar a que seis autos más llegaran a meta.

Mikkelsen seguía con su 'modo seguro' y no entraba en la ecuación por los puntos de la Power Stage. Suninen, tras haber cumplido a rajatabla la orden de llevar el auto a meta, tampoco iba a arriesgar su cuarta posición. Neuville ya aseguraba dos puntos al menos. Con Paddon sin una gran demostración, sólo quedaban los Toyota de Latvala y Tanak por llegar.

El primer parcial de Latvala le dejaba lejos de Neuville y Ogier. Sólo quedaba Tanak para inquietar a sus dos rivales por el título. El primer parcial le llevó a inquietar a Ogier, pero no parecía que el estonio se fuera a tirar con todo.

Y así fue, nadó y guardó la ropa. Certificó su tercera victoria consecutiva y se metió de lleno en la lucha por el título. Latvala cerró el doblete de Toyota que les coloca líderes del Mundial de Constructores. Paddon sumó el primer podio del año. Neuville salvó algo con su victoria en la Power Stage y Ogier sumó los mismos puntos que el belga con su 10º lugar.